DIÁSPORA, FABULAÇÃO E FORJA EM COREOGRAFIAS DO PENSAMENTO

Abstract

Memoria y movimiento, aquí transcritos como relatos personales y coreografías, actúan como metodologías para reflexionar sobre el papel del cuerpo en la producción de conocimiento en un sentido amplio: teórico-artístico-científico. A partir de tres ensayos coreográficos y un primer movimiento, se analizan experiencias de racialización teniendo en cuenta las relaciones entre danza, palabra y literatura, así como las relaciones con otras artes. Las dimensiones de la socialización racial, teniendo en cuenta diversos espacios de tránsito, entre los que destacan los espacios de la familia, la universidad y el arte, son pensadas en el sentido de buscar interpretaciones para el trauma, para la alteridad y para lo que se denomina producción de conocimiento incrustado . Para llevar a cabo tal empresa, las discusiones desarrolladas se apoyan en el pensamiento de Saidiya Hartman y su método de fabulación crítica (2021); Mahomed Bamba y la fabulación como elemento esencial para las poblaciones de la diáspora africana (2012); Grada Kilomba y su método de investigación a partir de sujetos, relatos personales y el contenido episódico del racismo (2019); la dimensión de la experiencia para los intelectuales negros en diferentes contextos del mundo, entre los que destacan las brasileñas Lélia Gonzalez (1984), Beatriz Nascimento (2018) y Sueli Carneiro (2011); la importancia de las danzas negras de Inaicyra Falcão dos Santos (2021) y Nádir Nóbrega (2017); las reflexiones de André Lepecki sobre los significados del pensamiento coreográfico y las políticas del movimiento (2017); las relaciones entre cuerpo y memoria de Esiaba Irobi (2002), Leda Maria Martins (1997) y Conceição Evaristo (2003). Además, esta tesis se apoya en las reflexiones de Edimilson de Almeida Pereira y lo que él definió como la epistemología afrodiaspórica (2017) y la construcción de una residencia simbólica y epistemológica de Lewis Gordon (2016); en la dimensión del trauma, las posibles interpretaciones surgidas de los trabajos de Rosana Paulino (1994-2015), Leno Sacramento (2017) y Zózimo Bulbul (1974). Teniendo en cuenta las formas de socialización racial y las dimensiones de la atribución de una alteridad, propongo lecturas para las relaciones entre raza, Estado y familia, apoyándome, sobre todo, en los aportes de Elizabeth Hordge-Freeman (2019), Lia Vainer Schuman (2018), Grada Kilomba (2019), Sueli Carneiro (2015) y Stuart Hall (2016). Más estrictamente sobre la dimensión del cuerpo y la experiencia en la construcción del saber –sobre todo, en lo que se refiere al realizado por las mujeres negras, discutiendo, más de cerca, lo que llamo saber corporeizado y pensamiento coreográfico, conté con la autoras Livia Natália (2015), Maya Angelou (2018), Beatriz Nascimento (2019) y Lubi Prates (2019). También fueron de gran importancia las contribuciones de Luiza Bairros (1995), Lélia Gonzalez (1984), Sueli Carneiro (2011) y Denise Ferreira da Silva (2017). Pensando en las relaciones de las mujeres negras con la institucionalidad y la producción de epistemologías propias, la presencia de Sônia Beatriz dos Santos (2007), Grada Kilomba (2019), Giovana Xavier (2019), bell hooks (2019) y Maria de Lourdes Siqueira (2006). En cuanto a la dimensión del cuerpo y la experiencia, los trabajos de Beatriz Nascimento (2018), Igiaba Scego (2018), Renata Felinto (2014) y Alex Ratts (2008) fueron de inestimable importancia. Luciane Ramos Silva (2017), Nádir Nóbrega (2017) y Conceição Evaristo (2005) contribuyeron en un análisis más detallado y elaboración del pensamiento coreográfico. Concluimos teniendo en cuenta la dimensión de incompletitud, silencio y lapso en lo que hemos elaborado, precisamente porque consideramos que esta es la gran pregunta que subyace en el pensamiento de la Afrodiáspora y su geografía de la memoria.